Cuando la línea de ayuda con problemas de comportamiento no puede ayudar
Los especialistas de la línea de ayuda con problemas de comportamiento han completado un intenso programa de capacitación impartido por profesionales en comportamiento animal. Pueden asistir a los dueños de mascotas con muchos tipos de problemas; sin embargo, hay algunos que no se pueden resolver por teléfono o por correo electrónico, ya que no es seguro ni preciso diagnosticar determinados problemas sin observar las posturas y las reacciones del animal ante algunos estímulos.
Agresión
Un animal que amenaza a otro animal o a un humano gruñendo, siseando, mostrando los dientes, intentando morder o mordiendo presenta un riesgo para otros. Existen muchos motivos por los cuales un animal puede comportarse de manera agresiva, por ejemplo, el miedo, la posesividad de alimentos u objetos o el comportamiento territorial o protector. Antes de que se pueda hacer un diagnóstico y dar recomendaciones, es necesario obtener los antecedentes completos de comportamiento recopilando información detallada y observando directamente al animal en su propio entorno. Esto no se puede hacer por teléfono o por correo electrónico; sin embargo, podemos suministrarle folletos detallados para explicar la causa de la agresión y los procedimientos que deben evitarse para no empeorar el problema.
El primer paso es que un veterinario examine a su mascota para evaluarla y ver si hay motivos médicos que ocasionen el comportamiento agresivo. El próximo paso es buscar los servicios de un especialista en comportamiento animal (consulte las sugerencias que le dejamos debajo para encontrar ayuda profesional).
Fobias
Algunos animales, generalmente, los perros, pueden desarrollar miedos intensos e irracionales, incluido el miedo a los ruidos fuertes y el miedo a quedarse solo. Muchas fobias pueden tratarse con éxito combinando la modificación del comportamiento y la terapia de medicamentos de corto plazo. Contamos con folletos en los que se explican estos problemas y las clases de procedimientos de modificación del comportamiento utilizados para trabajar con ellos. Si su mascota exhibe estos comportamientos, póngase en contacto con su veterinario para obtener información acerca de los medicamentos y con un especialista en comportamiento animal.
Exceso de acicalamiento
A veces, los perros y los gatos se lamen tanto que se les forman llagas en la piel o pierden mechones de pelo. El tratamiento, a menudo, radica en una combinación de terapia de medicamentos y modificación del comportamiento que solo podrán brindarle su veterinario y un especialista en comportamiento animal.
Búsqueda de ayuda profesional
Cuando el problema de comportamiento de su mascota es demasiado complejo para nuestros especialistas de la línea de ayuda, debe ir a su veterinario y a un especialista en comportamiento animal para obtener asesoramiento. Saber a quién recurrir puede resultar confuso. Ningún organismo gubernamental regula a las personas que trabajan con problemas de comportamiento animal, y estos especialistas pueden tener formaciones muy diferentes. Estas son algunas sugerencias que pueden ser de utilidad:
- Veterinario El veterinario es la primera persona a la que debe acudir. Infecciones del tracto urinario, desequilibrios hormonales, trastornos neurológicos, anomalías genéticas y problemas ortopédicos, además de enfermedades dentales, son solo algunos ejemplos de problemas médicos que pueden afectar el comportamiento de su mascota. Una vez descartados los problemas médicos, pregúntele a su veterinario si tiene formación específica en comportamiento animal. Si no la tiene, pídale una derivación a un especialista en comportamiento animal.
- Especialista certificado en comportamiento animal aplicado Para obtener el título de especialista certificado en comportamiento animal aplicado, es necesario contar con capacitación especializada en problemas del comportamiento en animales de compañía. La Asociación de Comportamiento Animal (ABS) otorga una certificación a aquellos especialistas en comportamiento animal que tienen formación académica, experiencia y que cumplen con las normas de ética de la ABS.
La Asociación Médica Veterinaria Estadounidense (AVMA) otorga una certificación a los veterinarios que realizan un curso especializado en comportamiento animal. Las personas que han trabajado con animales o los han entrenado durante muchos años no son especialistas en comportamiento animal, salvo que hayan recibido formación académica especializada - Entrenadores de animales. Algunos entrenadores de animales son autodidactas, y otros se formaron como aprendices de otro entrenador o asistieron a diversos seminarios de capacitación. Los entrenadores de animales no suelen contar con formación académica específica en el estudio del comportamiento animal. Los buenos entrenadores de animales tienen amplios conocimientos en diferentes métodos de entrenamiento que se centran, en particular, en reforzar el buen comportamiento. Utilizan el castigo de manera moderada, adecuada y humana, o no lo aplican en absoluto. El uso inadecuado de collares correctivos, incluido el uso de collares de ahorque para levantar al perro del suelo, no son métodos entrenamiento humanos ni apropiados, y pueden ocasionar lesiones a su perro.
- Las clases de entrenamiento son una manera excelente de establecer una buena relación con su mascota al enseñarle a responder en forma confiable a señales específicas. Sin embargo, las clases no resuelven problemas como la eliminación inadecuada, los ladridos, la agresión o la ansiedad por la separación. También deben utilizarse técnicas específicas de modificación del comportamiento. Lo mejor es que las apliquen entrenadores que también ofrezcan servicios de asesoría en comportamiento.
- Pregúntele al entrenador qué métodos utiliza y cuál es su formación. Asista a una clase y, si no se siente cómodo, váyase. Los instructores en entrenamiento canino pueden contar con las certificaciones que otorgan la Asociación Nacional de Instructores de Adiestramiento Canino (NADOI) o el Consejo de Certificación para Entrenadores de Perros Profesionales (CCPDT). La certificación indica que los instructores han aprobado un examen, tienen experiencia en entrenamiento de perros y han recibido la aprobación de sus pares. Si el entrenador cuenta con la acreditación de otra organización, pregúntele sobre los criterios de la acreditación. La certificación no garantiza que el entrenador utilice métodos de entrenamiento compasivos. Usted es quien debe determinar si los métodos son compasivos y adecuados para su perro.
Personas que debe evitar y de las que debe tener cuidado
- Personas que garantizan resultados: Los entrenadores y especialistas en comportamiento calificados siempre harán lo mejor que puedan, pero no pueden garantizar resultados, porque cada animal tiene su propia mente, que nunca puede ser controlada en su totalidad por los seres humanos.
- Personas cuyos métodos principales se centran en el castigo: El hecho de que la persona recomiende ahorcar, golpear o abofetear, encerrar o aislar en exceso a la mascota indica que tiene muy poco conocimiento del comportamiento animal o, directamente, ninguno.
- Personas que dan información errónea sobre sus títulos: Personas que se presentan como especialistas en comportamiento animal, aunque no cuenten con la formación académica correspondiente.
- Personas que desean entrenar a su mascota en lugar de usted: La mayor parte de los problemas de comportamiento son el resultado de interacciones entre el animal, el dueño y el entorno. Darle su mascota a alguien para que “arregle” el problema rara vez funciona, porque no se abordan estos tres aspectos. Los dueños deben trabajar con el animal en el entorno doméstico.
Si está dispuesto a dedicar tiempo, energía y recursos a trabajar con su mascota y encontrar personas calificadas que lo ayuden, tiene buenas probabilidades de resolver los problemas de comportamiento de su mascota con éxito.